El
fundamento ideológico del régimen oligárquico fue el orden y el progreso,
basado en el el control de acceso a los cargos de gobierno y a la
administración. La clase gobernante elegía a las personas más aptas para ocupar
los cargos.
El
Sufragio era voluntario, publico, colectivo, se compraban los sufragios, y para
completar cada partido echaba mano de los nombres de ausentes y muertos.
El
presidente buscaba remover a gobernadores no leales. Se llamó unicato a esa
fuerte concentración del poder político, en el presidente. Después de Celman,
en 1890, aunque Roca asumió a la jefatura del PAN, los presidentes que se
sucedieron acentuaron la tendencia centralizadora de la autoridad en su
persona.
Con
el avance de la secularización en las políticas del gobierno originó
enfrentamientos con la Iglesia Católica y con los católicos que asumieron a su
defensa. Sin embargo, la clase gobernante mantenía la restricción de los
derechos políticos de los ciudadanos. El sistema de gobierno impuesto por la
oligarquía fue conservador porque mantuvo cerrados los canales de participación
política a sectores muy amplios de la población, porque compartía la idea de
que el sufragio universal significaba el triunfo de la ignorancia universal.
También
fueron llamados: La generación del 80. Eran de hombres que tuvieron a su cargo
la dirección económica, política y cultural del país entre el 80 y 90. Era un
grupo porque compartieron un conjunto coherente de principios e ideas
fundamentales que convirtieron en objetivos de las acciones de gobierno que
llevaron a la práctica. Se caracterizó por la organización de la economía y la
sociedad.
En
lo económico, promovieron el desarrollo de recursos materiales: libre cambio,
que puso el acento en la atracción de los inmigrantes y los capitales
extranjeros, para integración de mercados mundiales y la producción de zonas
cultivables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario